16 jun 2014

ASALTO A LA EMBAJADA RUSA: LA MANIPULACIÓN QUE NO CESA





En su implacable afán por engañar a las masas­, nuestros medios de comunicación han vuelto a protagonizar otro bochornoso recital de manipulación periodística.

En esta ocasión, el escenario ha sido la embajada rusa en Kiev, Ucrania. Allí el pasado sábado un grupo de 200 gamberros neonazis la atacaron lanzando contra ella huevos y cócteles molotov, llegando incluso a volcar y destrozar los coches de los empleados que en ese momento estaban trabajando en las oficinas de dicha embajada. Para culminar su ultraje, estos gamberros retiraron la bandera rusa que ondeaba en el edificio, todo ello mientras las fuerzas de seguridad ucranianas miraban impasibles estos incidentes.

Pero lo mas escandaloso ha sido contrastar primero la información de estos sucesos, la cual está disponible en Internet a través de numerosas fotos y videos, y luego contraponerla a cómo la han presentado al público las diferentes radios y televisiones de nuestro país.

Para ilustrar mejor estas afirmaciones, les voy a mostrar en primer lugar un video en el que la prestigiosa Televisión Española (TVE) “informa” de estos hechos en apenas minuto y medio.




“Un grupo de manifestantes”: Así es como TVE llama a los gamberros neonazis que se congregaron frente a la embajada rusa en Kiev, los cuales, como muy bien señaló el Ministro de Asuntos Exteriores ruso Serguéi Lavrov, “buscaban invadir el edificio y derramar sangre”. Pero la cosa no quedó ahí. Por ejemplo, ¿por qué los reputados periodistas de TVE no mostraron las innumerables esvásticas que fueron pintadas en las verjas, puertas o incluso en los coches que los gamberros volcaron justo en frente de la embajada?




Y no sólo esvásticas, sino banderas y carteles en las que no se ocultaba la filiación ideológica de semejantes “manifestantes”.



Aquí está el video de lo que realmente sucedió allí:



Ahora bien, ¿por qué ese denodado esfuerzo por parte de los medios en ocultar esta evidencia: que el sector más radical y activo del nacionalismo ucraniano mantiene una línea política y de acción social ABIERTAMENTE NAZI? ¿No será porque si ellos cumplieran con su obligación profesional y contaran la verdad de lo que pasa en Ucrania, entonces la mayor parte de la población española abominaría de la “Revolución de Maidán” y automáticamente dirigirían sus simpatías hacia los insurgentes que combaten en el sudeste del país?

Efectivamente, no es necesario ser un experto para comprender que, desde el inicio de las revoluciones árabes, casi todos los medios españoles y europeos han “cerrado filas” en cuanto a información internacional se refiere, manteniendo una línea editorial claramente unidireccional (por ejemplo, cuando demonizan a Putin comparándolo con Hitler y los nazis, mientras que al mismo tiempo silencian el auge del nazismo en Ucrania, el cual ha sido y es alimentado y teledirigido por los Estados Unidos), encaminada exclusivamente a defender los bastardos intereses imperialistas de la OTAN (Organización Terrorista Aliada de los Nazis).



Mientras gran parte de la población española y europea vive anestesiada a base de fútbol y tertulias políticas vespertinas tan banales como vacías de contenido, las grandes potencias continúan luchando en al menos dos frentes abiertos: Siria y Ucrania. ¿Será la situación en Irak el detonante que desequilibre la balanza y provoque un giro de los acontecimientos tan radical como inesperado?